¿Cuántas veces os han dicho eso de «hay que ser positivo» o «tómatelo con más positividad»? Seguro que unas cuantas puedes recordar. Pero, ¿qué significa exactamente eso de «ser positivo»? ¿Es tan bueno como se suele defender? Hemos estado reflexionando e investigando sobre este tema y te traemos una interesante conclusión.
Según la RAE estos términos no tienen unas definiciones muy diferentes:
- Positivo: Dicho de una persona: Optimista, inclinada a ver el aspecto favorable de las cosas.
- Optimista: Propensión a ver y juzgar las cosas en su aspecto más favorable.
Pero sí tienen connotaciones que distinguen unos comportamientos optimistas de los positivos. Te contamos.
Las personas positivas piensan que siempre todo va a salir bien, que todo está a su favor, que «pase lo que tenga que pasar». Y puede que así sea, pero ¿y si no? ¿Esas personas se han planteado que algo puede salir mal? ¿Están preparados si eso ocurre? ¿Tienen un plan B? La respuesta suele ser no, porque las personas positivas tienden a idealizar la situación y a esperar que ocurra lo que ellos quieren.
«Good vives only» suele ser su lema, pero por desgracia, la vida real no está compuesta solo de buenos momentos y risas, también hay que pararse a reflexionar, tomar decisiones y disfrutar del camino al que te llevan tus propias elecciones.
Por otro lado, las personas optimistas suelen ser conscientes de la situación que están viviendo en la actualidad. Sí, por supuesto también esperan que pase lo mejor pero saben que puede no ser así, saben que necesitan un plan B por si todo cambia y tienen que cambiar de rumbo.
Es importante ser optimista, especialmente en los momentos más complicados, porque eso sacará lo mejor de nosotros mismos. Nuestras ganas de superarnos, esforzarnos e ir a por nuestro objetivo aumentarán si tenemos en mente que podemos hacerlo, conseguirlo o superarlo, pero siempre con los pies en la tierra, siendo conscientes de nuestra realidad y la que vive el mundo en este momento.
No sabemos muy bien lo que nos deparará el mañana, y menos con la situación que estamos viviendo actualmente, pero es importante mantenerse optimistas y prepararse para todo lo que pueda venir.
Es momento de invertir en ti, en tu formación y en tu salud tanto física como mental, para que, sea lo que sea lo que venga, te pille lo más y mejor preparado posible.
En resumen, la suerte no es algo que se tiene, es algo que se consigue poco a poco.
Desde aquí os animamos a ser todo lo optimistas que podáis, sed conscientes de vuestra realidad y transformarla en lo mejor para vosotros con mucha actitud.